Instinto de supervivencia.

Ahora que me encuentro  revuelta entre tus piernas me pregunto si te has dado cuenta que es nuestro primer amanecer juntos. Ya lo sé. No me importa. Cada vez que estoy contigo me siento como si de repente estallara una bomba. Sé que debería huir a un lugar seguro; pero tus ojos me dicen que me quede y yo, dolorida por el estallido, permanezco en tu radar.  Antes de que te puedas reír aún más de mi, quiero aclarar que sé perfectamente que en el caso contrario,  a pesar de que me vendería por lo otro, tú correrías lejos sin mirar atrás. ¿Y qué? Soy yo la que decido quedarme y sufrir, no tú. Así que ya puedes ir borrando de tu cara esa sonrisa célebre cínica y teme por ti y tu querido egoísmo, el cual dentro de poco será el único que ría tus gracias.

Comentarios

Entradas populares